martes, 24 de enero de 2012

Los concertados respaldan que cada centro decida si pide dinero a los padres.

En 24 horas se disiparán todas las dudas. Los centros concertados comprobarán mañana si comienzan a cobran los gastos de funcionamiento del segundo semestre de 2011, tal y como se comprometieron el viernes los responsables de Educación y Hacienda. Las patronales que aglutinan estos colegios subvencionados confían en que, tras varios plazos incumplidos, esta vez se salde la deuda.

Lo cierto es que si persisten los impagos, respaldan que los colegios pidan aportaciones voluntarias a los padres para poder seguir funcionando. «Cada centro puede tomar medidas dependiendo de los recursos que dispongan las familias», apuntó ayer la presidenta de Escuelas Católicas en la Comunitat, Vicenta Rodríguez, quien añadió que se convocarán asambleas para informar a los progenitores. La decisión de solicitarles dinero está en manos de las Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (Ampas) y la dirección del colegio, añadió.

En la misma línea, el presidente de la Federación de Centros de Enseñanza (Feceval), José Manuel Boquet, explicó que cada centro «tiene la posibilidad de pedir ayuda a los familiares de los alumnos». Esta opción está supeditada a la situación socioeconómica de los progenitores, que varía según la zona en la que se ubican las instalaciones (depende de si es un área acomodada o un barrio deprimido).

Boquet matizó que, a día de hoy, es una decisión que toma individualmente cada colegio. «Otra cosa sería que si continúan las deudas se tomara como medida corporativa», aseveró. Desde Feceval todavía no han concretado ninguna medida de presión. Pero si el Consell no abona las cantidades que nos deben, se reunirán el jueves. Ese día el consejo rector de la Unión de Cooperativas Valencianas (Ucev) también tiene previsto un encuentro para estudiar la situación.

La presidenta de Escuelas Católicas admitió ayer que la consellera de Educación, María José Catalá, está haciendo «todo lo que puede y comprende nuestra situación» pero lamentó que la falta de pago les «provoca cada día más angustia, inquietud y frustración».

La deuda correspondientes al tercer trimestre de 2011 por los gastos de funcionamiento a los centros católicos de la Comunitat ronda lo 35 millones de euros. Este dinero se destina a cubrir el alquiler, el gas o el agua pero también sirve para pagar las nóminas del personal de Administración y Servicios. En algunos colegios se han colgado carteles con el lema 'A este centro, Conselleria no le paga' y se están enviando cartas a los padres de alumnos para que conozcan la situación en la que se encuentran. Rodríguez matizó que no se plantea el cierre de colegios como medida de presión.

Por su parte, los directores de institutos públicos de la Comunitat se concentrarán hoy ante la Conselleria por los impagos.

Las Provincias
24.01.12  - B. LLEDÓ/EFE


2 comentarios:

Anónimo dijo...

se sabe si han pagado ya y se han solucionado los problemas?

Anónimo dijo...

Segun el periodico, la orden de pago se ha cursado hoy, mañana veremos si es verdad.