El principal criterio de admisión cuando se implante el distrito único será tener un hermano en el centro, que dará ocho puntos
21.12.12 - 00:33 -
La implantación del distrito único permitirá cambiar de manera radical el proceso de admisión de alumnos en los colegios de Valencia capital, pues se multiplicarán las posibilidades de elección por parte de las familias. Tal y como anunció ayer la consellera de Educación, María José Català, el próximo curso la ciudad pasará de tener 24 zonas educativas a un máximo de cinco, mitigando la rigidez del sistema actual. Hoy en día la elección se limita a los que figuran en el área de residencia de los padres, que en el mejor de los casos pueden optar por 14, como sucede en el distrito VII (en Olivereta). En la práctica la reducción zonal permitirá multiplicar la cifra.
El nuevo modelo será diferente en función de la población. Para la mayoría de municipios sólo existirá una zona, de manera que todos los habitantes obtendrán los mismos puntos en el criterio de proximidad al centro, uno de los factores que interviene en el proceso de escolarización y que es determinante en el modelo actual. Por ejemplo, localidades importantes como Torrent o Paterna perderán las zonas. Incluso se baraja adoptar la misma medida en el caso de Castellón. Sin embargo, Alicante seguirá los pasos de Valencia y mantendrá la división, aunque también se reducirá. En la actualidad, para los colegios públicos hay diez y para los concertados tres.
El motivo esgrimido por Català para no crear una sola zona en las dos ciudades es la «complejidad» que supondría en la organización del proceso de matriculación. Sin embargo, no se renuncia a la idea, aunque se hará de manera progresiva, por lo que posiblemente se aplique a partir del curso 2014-2015.
El sistema actual hace que la proximidad desde el domicilio sea vital en la admisión. En la Comunitat, si una familia elige centro en su distrito obtiene la máxima puntuación en la valoración de este factor (5 puntos) y si opta por uno situado en una zona limítrofe suma dos. Hacerlo en un colegio alejado, ubicado en un área distinta a las anteriores, supondría no conseguir ninguno. Aunque en la decisión final computan más criterios, como tener hermanos escolarizados (5), que los padres sean trabajadores del colegio (5), el umbral de renta (0,5) o situaciones de discapacidad o familia numerosa (5), el peso de la distancia es fundamental en la decisión final entre familias que parten de la misma situación (no reúnen los requisitos citados).
Con el nuevo modelo, sin distinción geográfica en la mayoría de localidades, la admisión dependerá en última instancia del cumplimiento del resto de criterios, y en caso de empate, se deberá establecer un procedimiento objetivo para solucionarlo. En la actualidad, se queda la plaza el que el obtiene más puntos por tener hermanos escolarizados, y si no se da el caso o sigue la igualdad, en el de discapacidad, seguido del de renta. En última instancia podría sortearse la plaza.
En el caso de Valencia y Alicante, al mantenerse algunas zonas, no habrá libertad de elección total el próximo año, pues seguirán habiendo familias que partirán de una situación de desventaja si su centro preferido está un área distinta a la de residencia al tener menos puntos que los que vivan cerca.
También habrán cambios en el resto de variables, además de la pérdida de peso de la proximidad al domicilio o al trabajo. La que más contará será tener a un hijo escolarizado en el centro, que pasará a valorarse con ocho puntos. La conselleria dijo ayer que significará hasta el 55% de la baremación total. Con este cambio se busca priorizar la conciliación de las familias, siguiendo los mismos pasos que se han dado en la comunidad de Madrid, donde la mayoría de municipios funcionan con la zona única. En las grandes ciudades, incluida la capital, se aplicará el curso que viene.
En palabras de Català, el modelo «rompe totalmente con la anterior estructura de valoración, donde el criterio más importante era la proximidad del centro al domicilio familiar. Ahora este requisito pierde importancia a favor de otros, como los hermanos en el colegio, la renta y otros criterios que se introducirán en el nuevo decreto». La consellera ya dijo en una entrevista en LAS PROVINCIAS que se daría un mayor peso a la renta que el que tiene en la actualidad. Sin embargo, llama la atención la introducción de nuevos criterios adicionales, que no serán concretados hasta la próxima semana.
La implantación de la zona única afecta a todos los centros sostenidos con fondos de la administración, es decir, tanto a la red pública como a la privada concertada.
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